Llenáte de su gracia

En muchas ocasiones me he sentido avergonzada por la forma en la que actuó. No siempre pongo en práctica el dicho “piensa antes de hablar” o actuar. Lastimosamente creo que nosotros como jóvenes nos dejamos llevar mucho por el momento y no analizamos de forma concreta las repercusiones que nuestras acciones pueden traer.

Te hablo de esto porque hay algo que me llamo mucho la atención sobre el pasaje de la Crucifixión. Se nos menciona que, junto a Jesús, otros dos ladrones fueron condenados. Por un momento te pido que te pongas en los zapatos del ladrón que se arrepiente. Imaginemos su día:

*Amaneció en una cárcel

* Quizás con miedo porque sabía que unas horas iba a sufrir las consecuencias de sus actos. *Avergonzado por lo que iba a vivir.

*Avergonzado de que su familia lo viera en esta situación.

*Quizás con arrepentimiento en su corazón por haber hecho las cosas que hizo

Ahora quiero hacerte una pregunta ¿alguna vez te has sentido tu así? ¿haz sentido que los errores que cometiste en el pasado te han hecho prisionero del presente y con miedo a lo que pueda venir en el futuro? Yo sí , muchas veces. Tal vez en tu caso, como en el mío, tus errores no han sido “tan” graves, pero sientes que te condenan tu diario vivir.

Si es tu caso hoy quiero compartir algo que conmovió mi corazón. El ladrón vio todo el proceso que Jesús llevo en su crucifixión, él estaba consiente que Jesús no tenía que pasar por eso, que él era un hombre inocente. Quizás en cualquier otro caso, la mirada de un hombre condenado inocentemente podría reflejar odio, maldad, rencor, pero… este no fue él caso. El ladrón vio en la mirada de Jesús amor, gracia, misericordia, compasión. Aún cuando él estaba viviendo su peor momento.

Quizás hoy tú estas viviendo el peor momento de tu vida, un momento en donde sentís que no hay salida  en donde sería mejor cualquier otra cosa que levantarte día a día. Tal vez te sientas avergonzado por todos los errores que cometiste. Pero hoy quiero decirte algo. Algo que me cambio mi perspectiva.

El ladrón ve a Jesús en la cruz y se arrepiente, y algo totalmente increíble pasa. Jesús lleno de gracia le dice «De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso» Lucas 23:43. “El mal día del hombre malo se arregla con el regalo gratuito de un Dios generoso en misericordia y gracia” (Max Lucado 2007)

Puede que tu día haya iniciado mal, pero Jesús prometió que hoy estarías en el paraíso. El ladrón entendió que el lenguaje de Dios es la gracia inmerecida. Bajo este contexto el paraíso de Dios se traduce a gracia. HOY HOY HOY HOY, hoy es el día en el que puedes recibirla.

Hoy es el día en el que puedes ver a Jesús actuando bajo su gracia, para hacer milagros. Hoy puede ser el día en el que veas la gracia de una forma sobre natural si te arrepientes de corazón y se la pides a Jesús.

Amigo te animo que satures todos tus días con su amor. Que todos los días remojes tu mente en su misericordia. Si viene a tu mente un pensamiento de condenación o vergüenza a tu mente, recuerdes que Jesús ya pagó por eso, su muerte lavó nuestros pecados, él quita los pecados del mundo. El mayor premio que nosotros como seres humanos podemos recibir es su gracia en nuestra vida. Es la lotería más grande que podemos jugar y lo mejor es que no tuvimos que pagar por el boleto. Dios te ama y te está esperando con sus brazos abiertos.

Te mando un abrazo y espero que esta entrada haya sido de bendición.

-Tu amiga, Mafer Jordán